Lo estamos pasando muy bien...

Después de casi dos meses de trabajo, de reencuentros con amigos y compañeros de ruta que parecían perdidos y del siempre venturoso descubrimiento de nuevos aliados, entramos a la tercera fase, que viene a ser, lógicamente, un poco la vencida. Más o menos dónde todo se define. Las papas quemarán bastante en estos meses que vienen.
¿Dificultades? Todas. Desde el vía crucis de la captación de recursos (lotería Fondart incluida) hasta el complicado proceso de apropiación de este lenguaje tan particular que es el verso.
Hemos avanzado, sin embargo, entre guitarreos y panderazos, entre Biblioteca, parquecito y Robin, entre risas (muchas) y enfrentamientos (pocos). Es decir, como cantábamos en dictadura: Vamos bien, mañana mejor. Estribillo en verde esperanza para cuando el cielo se nubla.
En este retomar de ensayos vamos a permitir que el desvarío nos domine ("Hace falta el caos dentro de uno mismo para dar a luz una estrella danzarina", del mismo bigotón que inspiraba a Hitler. Si canalizamos la idea sin odios: ¡podríamos conquistar Austrias y Polonias a punta de Quitapenazos!) : que una locura de tablas, un delirio de emociones y energías nos controle en cada pasada por la escena. Sangre, sudor y lágrimas, todos los días: es decir

¡BASTA DE HABLAR DE SANDECES!:
Un Teatro en cuerpo y en alma
Una luz violenta y calma:
Los actores siendo peces
Hombres bellos que hagan veces
De espíritus verdaderos
Las luces del agujero
Los Cristos en la penumbra
La vida que se vislumbra
Al centro del basurero.

Después de todo, es cosa de mirar la foto: ¡Lo estamos pasando muy bien!

Así que, ahora, vamos juntos a por ello.

El Director.